Cómo ayudar en la supervivencia de los implantes y de los dientes
En los últimos tiempos los implantes dentales se convirtieron en una excelente opción para quienes quieran recuperar su función y su estética. Algunos profesionales consideran que, en ciertos consultorios, se lleva a cabo una práctica no muy aconsejable, se termina quitando un diente natural que podría haber sido salvado.
Es muy importante que el dentista intente hacer todo lo posible para salvar las piezas dentales naturales, a menos que estén en una condición muy comprometida, en muy mal estado, en donde no se puede salvar realmente y realizando una restauración puede tener buenos resultados a corto y mediano plazo. En estos casos muy puntuales será conveniente la extracción del diente y el reemplazo por un implante dental.
A continuación te hablaremos acerca de una investigación en la que se evalúa la supervivencia a largo plazo de los dientes naturales en comparación de los implantes. El estudio indica que los dientes naturales que fueron afectados por distintas enfermedades periodontales, sin importar que tengan esperanzas de ser salvados, pueden ser reemplazados directamente por implantes dentales.
En el caso de los pacientes con periodontitis crónica que participaron del estudio el 20,4 por ciento de los dientes tenían una esperanza cuestionable de ser salvados, más del 34 por ciento no tenían esperanzas y se terminaron perdiendo. De esto se puede obtener una conclusión general, el 80 por ciento de los dientes (aproximadamente) que no tienen esperanzas podrían sobrevivir a largo plazo, pero esto es posible se realiza un control y un correcto mantenimiento, además de llevar el tratamiento adecuado.
En relación a la supervivencia de los implantes dentales se puede saber que por norma general algunos reportes señalan un éxito superior al real por el simple hecho de estar avalado por alguna empresa que se encarga de la fabricación de implantes dentales.
Existen algunos criterios que se pueden tener en cuenta para establecer el éxito de los implantes dentales. Un punto clave es que radiologicamente no se puedan ver signos de radiolucidez preiimplantaria. Además, la pérdida osea vertical deberá ser menor a los 0,2 milímetros.
El diente no tendrá que tener signos de dolor, infección, vulnerabilidad o parestesia. Y, por último, la posición del implante deberá permitir la creación de una prótesis que sea estética.
Si se llegan a tener en cuenta los aspectos anteriores el éxito de los implantes puede ser superior en el 85 de los casos. Es muy importante encontrar un profesional que busque satisfacer las necesidades del paciente pero siempre valorando su salud y su bienestar.
Recuerda siempre la importancia de visitar al dentista de manera frecuente y realizar una correcta higiene dental mediante un cepillado al menos tres veces al día, uso de hilo dental y enjuagues.